No hay una razón para sentir lo que escribo, si solo fuese una no tendría sentido.
Noto que mi alma vaga por las calles, vacía, en busca del cariño o compasión de otra alma que no la corresponde y mientras, mi físico abandonado llora, llora sin saber por qué, se abraza a la almohada y piensa que es alguien, alguien...que no sé quién es.
Mira viejas fotos, recuerda viejos momentos pero éstos ya no le hacen sonreir e intenta leer, pero sus ojos borrosos por las lágrimas no le permiten saber cuáles son las letras que escribía ayer.
Y mira la Luna, su brillo, el que antes siempre miraba con ojos de enamorada, nota que ya no le llena...ahora piensa en un poeta cuyos poemas hace meses que no lee.
Se mira al espejo, mira sus ojos y se detiene a observar sus pupilas y en ellas ve a través de las de su poeta, escribiendo...nuevas letras que ahora son para otra de ellas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario